A trabajos forzados me condena mi corazón, del que te di la llave. No quiero yo tormento que se acabe, y de acero reclamo mi cadena.
Ni concibe mi mente mayor pena que libertad sin beso que la trabe, ni castigo concibe menos grave que una celda de amor contigo llena.
No creo en más infierno que tu ausencia. Paraíso sin ti, yo lo rechazo. Que ningún juez declare mi inocencia, porque, en este proceso a largo plazo buscaré solamente la sentencia a cadena perpetua de tu abrazo.
3 comentarios:
Emocion... eso es lo que mueve... la emoción... y que no deje de moverse nunca...
Un beso gigante!! Un placer tenerte en casa... ya sabes el camino, no lo olvides nunca...
:)
Hola amiga, después de tanto tiempo, paso a dejarte un fuerte beso y abrazo. Espero que estés bien.
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